Todos los Habanos son cubanos, pero en cambio, no todos los puros confeccionados en Cuba son Habanos.
El título Habanos es la Denominación de Origen Protegida (D.O.P.), reservada para una selección de las más prominentes marcas, cuyos tabacos se confeccionan siguiendo las normas más rigurosas, a partir de hojas de tabaco cosechadas en zonas determinadas también protegidas como denominaciones de origen.
Los Habanos se elaboran totalmente a mano, aplicando métodos cubanos que se utilizaron por primera vez en La Habana hace más de dos siglos, estos se transmiten de generación en generación y se han mantenido casi invariables hasta nuestros días.
Multiples procesos manuales, incluyendo los agrícolas y de fábrica, son realizados entre la siembra de la semilla y el empaquetado de cada habano.
Todos tienen que superar estrictos controles establecidos por el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida (D.O.P.) Habanos, para ser merecedores del preciado título y ser considerados Habanos.